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sábado, 30 de julio de 2011

Capitulo 51

Me apoye en su pecho y podía sentir el latir de su corazón, podía sentir lo nervioso que estaba. Cerré mis ojos mientras Bill seguía jugando con mi cabello hasta quedarme profundamente dormida.

Era de mañana, sentía como los rayos del sol pegaban contra la ventana de la habitación y también contra mi rostro. Pensaba en lo sucedido anoche y en que a Bill se le había olvidado cerrar bien las cortinas. <<Eres tan olvidadizo>> susurre mientras miraba su hermoso rostro que seguía con sus ojos cerrados. En aquella mañana por suerte los recuerdos no me invadieron, pero sentía un gran alivio por que él estaba aquí conmigo, me sentía aliviada por que no fue un sueño y se mentía aliviada por que no me separaría de él por un momento. Pasaron unos minutos y Bill comenzó abrir lentamente sus ojos, cuando me di cuenta de aquel detalle cerré los míos de inmediato.

Bill: (besa tu frente) eres tan hermosa TN… parece que esto fuese un sueño.

Tu: (todavía con los ojos cerrados) tú también eres hermoso Bill… y por suerte esto no es un sueño.

Bill: (sonríe) ¿y tu desde cuando estas despierta? Eres una tramposa.

Tu: (sonríes y luego empiezas hablar como bebe) hace rato, y no soy tramposa.

Bill: (sigue sonriendo) esta bien, no eres una tramposa.

Tu: así me gusta. Bill… ¿Qué aremos hoy?

Bill: déjame pensar… Bill piensa, piensa… ¡ya lo tengo!

Tu: (esta loco) ¿y que aremos?

Bill: sorpresa.

Tu: ¡eso no se vale!

Bill: será mejor que nos arreglemos por que vamos a estar juntos todo el día.

Tu: Bill… tengo un problema.

Bill: ¿Cuál es el problema?

Tu: (te ruborizas) ¡Bill todavía mi ropa esta mojada!, no tengo otro cambio y no pienso ponerme aquella ropa e ir a mi casa a cambiarme. (Te acuerdas de algo importante y te exaltas) ¿Qué voy hacer? ¡No les avise a mis padres que no llegaría a casa! Excelente TN eres tan despistada como Bill que se le olvido cerrar las cortinas.

Bill: ¡hey! ¿Qué te sucede conmigo?

Tu: (le dedicas una sonrisa) nada.

Bill: mejor anda a meterte a la ducha mientras yo arreglo ese problema.
Me pare y me dirigí al baño, hay me tome mi tiempo, me mire en el espejo por un buen rato. Mi mente parecía un torrente de preguntas y millones de supuestas respuestas. Lo que no me había dado cuenta era lo que se reflejaba en el espejo. De la nada entro en un profundo trance y comienzo a ver de apoco figuras, no las que habían detrás de mi si no que otro tipo de figuras. Algunas conformaban el ambiente físico, o eso aparentaba.

Me comienzo a ver a una mujer caminando hacia la nada, con la mirada ida y sin expresión alguna. Aparentaba mucho dolor. La gente caminaba por el lado de ella sin que nadie se percatara de su estado, es como si fuera invisible para todos. Para mi ella se me hacia alguien que ya conocía. Pero ¿Quién era?

De la nada aquel ambiente se fue transformando, parecía que estaba viendo los pensamientos de la muchacha. Aparecieron las primeras imágenes en el espejo, había algo que me estremeció por completo… ¿aquel que aparecía ahí era Bill?

Comencé a ver recuerdos de la muchacha, eran los mismos recuerdos que tenia junto a él, aunque algunos no lo eran o todavía no los vivía. Fue en aquel instante que me doy cuenta que la chica del espejo, aquella que tenia la mirada ida y su rostro no tenia expresión era yo, que estaba sola en aquel frío mundo detrás del espejo, aquella que con solo ver su caminar podía ver su tristeza de haber perdido a un ser querido, en este caso a la persona que más amaba en este momento.

Se me revolvió el estomago, me empecé a sentir mareada, pero no podía despegar mi mirada en aquellas imágenes. Aquel torrente de preguntas y posibles respuestas parecía ya ser una marejada llena de incógnitas que invadían mi mente. ¿Qué hacia yo detrás del espejo?, ¿Por qué estaba en aquel estado?, ¿será que todo esto es un sueño y lo que muestra el espejo es la realidad?

No sabía que hacer y a medida que pasaba el tiempo todo me daba vueltas en la cabeza y empecé a luchar contra aquella fuerza que hacia que estuviera parada en aquel lugar mirando el espejo cosas que no me gustaban saber, cosas que podría ser verdad y que me hacían pensar que esto era un gran sueño.

Ya cuando pude ganar la batalla me fui a la bañera, prendí el agua caliente y me metí dentro de ella. Sentada en el piso mientras el agua caliente caía por mi cuerpo pensaba en lo que había visto, en lo que no quería saber pero que tristemente ya era conocido por mi, en estos momentos deseaba no ser yo a quien le sucedieran este tipo de cosas, solo quiero ser alguien normal, con una vida normal, pero eso no podría ser así.

Poco a poco comencé a tener control en mi cuerpo, pero pasaron vario minutos cuando eso ya era un hecho. Ya cuando estaba más tranquila me bañe, me tape con las toallas, abrí un poco la puerta del baño para poder divisar quien estaba en la habitación, pero no encontré rastro de vida humana, así que decidí salir y vi en la cama ropa de mujer seca y con una nota.

TN:

 Esto es para que te coloques, no preguntes
     como me conseguí estas prendas por que no te diré.

    Te quiere  Bill

Tu: (sonríes) que eres lindo Bill, te haz portado tan bien que creo que no te mereces a un monstruo como yo…

Me fui al baño nuevamente a ponerme las prendas que me habían dejado en la cama, ya cuando estaba lista al no ver a Bill por ningún sitio pensé en salir del lugar y bajar las escaleras para ir a la cocina. Bingo, hay estaba esperándome con Tom muy feliz de la vida.

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